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Un fin de Semana en Tossa by @paulatossa
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Un fin de Semana en Tossa by @paulatossa
Hola amiguis, me llamo Paula, soy “tossenca” de nacimiento, y en Instagram me encontraréis como @paulatossa
Los autóctonos de Tossa tenemos una gran característica respecto el resto de la humanidad, y es que tenemos una verdad absoluta: Tossa es el lugar más precioso de todo el universo.
Y con esta premisa ahora os explicaré como pasar un fin de semana en mi precioso pueblo, conocido también como el Paraíso Azul de la Costa Brava.
Por cierto, ¿sabéis quién nos bautizó de esta manera? Fue el famosísimo artista Mark Chagall durante su estancia en Tossa en el año 1933, cuando Tossa se transformó en la Babel de las Artes, pero ese es otro tema que os explicaré en otra ocasión.

Suponiendo que muchos de vosotros no residís en Tossa, empezaremos por recomendar sitios donde quedarse a dormir, un tema importante para disfrutar plenamente del fin de semana. Aquí tenéis dos opciones:
Horta Rosell. Hace poco tiempo que este pequeño hostal lo lleva un chico muy joven de Tossa, ¡y a mí me encanta la gente emprendedora! Además, tienen una terraza fantástica muy colorida. Las habitaciones están muy bien y el trato del personal es excepcional. Es un equipo joven y muy trabajador.
Hotel Tarull. Es un hotel familiar con mucha historia. Tras muchos años en la profesión han triunfado gracias al trato directo que hay entre los propietarios y los clientes. Disponen también de una terraza donde se puede tomar una copa con unas vistas increíbles de Tossa.
Ambos son grandes opciones donde quedarse a dormir en Tossa de Mar.


Una vez llegados a Tossa el viernes por la tarde, la mejor opción es dejar las maletas en el alojamiento escogido y dar un buen paseo por el barrio de la Roqueta (es donde vivían antes todos los pescadores y evidentemente también mi familia. Tengo muchos recuerdos de mi infancia allí), pasar por el casco antiguo hasta el paseo y subir a Vila Vella hasta el punto más alto, el Faro. El Faro es un lugar excepcional, con unas vistas a mar abierto que no tienen precio. Podemos parar en el xalet de Braham de bajada y contemplar como cambian los colores del cielo, de azules a lilas mientras se va apagando el día. De vuelta, cuando volvamos a pasar por el barrio de la Roqueta podemos parar en Can Paset. Un pequeño bar muy singular que solo abre en verano. Can Paset es uno de los bares más míticos de Tossa, recuerdo de pequeña a mi bisabuelo sentado en la puerta con su puro tomando algo esperando a que mi abuelo volviese de pescar. ¡Qué recuerdos! En este pequeño bar, regentado por la familia de toda la vida, encontraréis las paredes llenas de fotos antiguas de Tossa, muchas de mi familia. Además, podréis degustar una especialidad “tossenca”: el bacalao rebozado con tomate. Ey, 100% típico de Tossa. Nosotros siempre lo cocinamos para Navidad porque nos encanta y porque nos recuerda a los abuelos.

Para cenar iremos al Romantic Garden, el jardín del Horta Rosell donde cada fin de semana hay música en directo. Se puede comer de todo y muy bien de precio, las bravas y los nachos están buenísimos, y los Sandwichs Horta y las hamburguesas también.
El sábado por la mañana, muy pronto después de desayunar en el hotel, iremos a la oficina de Turismo a buscar un mapa del Camí de Ronda en Tossa, o si lo preferís también están en la web. Prepararemos una mochila con agua, toallas para la playa y protección solar. Si no tenéis podéis parar en la Perfu Tossa y si decís que vais de mi parte seguro que os hacen un regalo.
Haremos uno de los tramos más bonitos del Camí de Ronda, dirección Tossa-Sant Feliu de Guíxols. Empezaremos por ir hasta la playa y desde allí iremos siguiendo las indicaciones, pasaremos por la playa de la Mar Menuda y siguiendo las flechas verdes iremos subiendo. La primera parada es impresionante: el Mirador, desde donde puede observarse la inmensidad de nuestra preciosa Vila, rodeada de mar y montaña.
Seguiremos el tramo y en poco rato pisaremos una cala que me tiene el corazón robado, Cala Bona. Allí, podremos ver el pequeño chiringuito que hace más de 60 años gestiona la familia de mi amiga Eva. Un chiringuito extraordinario al que más tarde iremos a comer, y donde podemos pararnos a tomar un buen vermut mientras observamos el paisaje. Podemos acompañar el vermut con unas patatas bravas que hacen a la leña, como casi todo. Una vez acabado el vermut, seguiremos el tramo del camino hasta Cala Pola. Una cala de colores azules preciosos, ideal para tomar el sol y bañarnos. Como anécdota contaros que en esa cala rodaron hace años un spot de Estrella Damm, el anuncio del concierto en la playa de The Vaccines. Para los locals de Tossa fue toda una experiencia, ya que muchos pudimos hacer de extras, lo que significó en pleno mes de mayo disfrutar de un buen concierto en la playa mientras se ponía el sol.
A la hora de comer ya podremos volver en dirección al chiringuito de Cala Bona donde tendremos la mesa reservada. Las amigas de Cala Bona, con Paquita al mando sabrán recomendaros muy bien. Es importante escuchar sus consejos porque siempre aciertan. Yo os recomiendo hacer lo siguiente: picar unos mejillones de roca con salsa especial y un pulpo con romesco d’en Quico. Los calamares a la romana también son su especialidad, así que vosotros mismos. Y de plato principal no hay ninguna duda: un buen arroz. Hacedme caso, el arroz de Cala Bona es muy especial, ya me lo diréis… Y de postres yo siempre me pido un buen mojito de mango, pero bueno, eso ya es cosa de cada uno.

Después de comer podemos quedarnos por las rocas de la cala y por la tarde de vuelta hacia Tossa por el mismo camino que hemos hecho por la mañana. Otra opción es ir en coche o moto y aparcar en la parte de arriba de Cala Bona, pero atención porque la zona es pequeña y no es fácil encontrar sitio. Nosotros normalmente vamos en moto o caminando.
Ya en el hotel, un poco de descanso y una ducha para estar preparados para la noche. Pasear por la playa no tiene precio, sea la época que sea y os recomiendo ir a alguna de las terrazas que hay delante del mar para disfrutar del momento. ¿Dónde podréis hacerlo? Vermutería Núria, Bar de Vila Vella, la nueva coctelería Canela en rama, o bien en segunda línea pero no menos bonito como el Hotel Bonet, con una terraza ideal. El Bar Maxi o bien el transgresor Bar Savoy.
Todos ellos son locales donde vamos muy a menudo y cada uno tiene cosas interesantes, pero os lo dejo a vuestra elección. De la misma manera para elegir restaurante donde cenar hay infinidad de sitios maravillosos, aquí tenéis una lista: Mestre d’Aixa, Restaurante Bahia, Restaurante Minerva, Restaurante Marina, Pizzería Bello, mucha variedad y todos recomendables 100%.
¿Una copita antes de ir a descansar? Tenemos el Bar Maxi, Bar La Gamba o el Bar Kars. Por último, unos bailes rumberos en el Tahití, con música en directo y donde puede revivirse el espíritu “tossenc” de los 80, ya que el hijo de los grandes Rumba Tres ha trabajado muy duro para mantenerlo.


El domingo por la mañana nos quedaremos por el centro de Tossa, que también merece mucho la pena visitar. Antes de ir a desayunar iremos a uno de los sitios con mejores vistas de nuestra Vila, iremos a la calle d’Es Cars a contemplar como sale el sol. Dirección a la playa de Es Codolar buscaremos el indicativo del Camí de Ronda y subiremos unas cuantas escaleras. Cuando nos demos la vuelta para ver la Vila, tendremos una de las mejores imágenes que podremos tener de recuerdo de Tossa. Una vez contemplado, volveremos a desayunar. Si el hotel no tuviese desayuno, o simplemente queréis desayunar fuera, en Tossa hay muchísimas cafeterías donde hacerlo como dios manda y también bares fantásticos. Aquí van unos cuantos: Pastisseria Neras, Patrick’s Bakery, Loop Café, Can Ramonet, Bar Savoy o Can Tonet. ¡A cada cual mejor! ¡Lo tendréis difícil, pero la vida es para las valientes!
Dedicaremos la mañana a pasear y a bañarnos en la playa si se presenta la ocasión. Podemos ir a Es Codolar, a la Platja Gran, Es Racó o a la Mar Menuda, todas ellas playas maravillosas.

Dependiendo de la playa a la que vayamos nos encontraremos con un chiringuito u otro, y que queréis que os diga, a mí me gustan todos. Para una vista diferente a la de la mañana, la Mar Menuda. Para estar en medio, Chiringuito Claudi. ¡Todos merecen la pena!
Y si tenéis ganas de una gran despedida, haremos una comida con vistas y podemos escoger entre: Sa Rumba, Restaurante Minerva, Restaurante La Zarzuela o bien la Pizzería Bello. Antes de volver yo no dudaría en dar otro paseo por la Vila y de esta manera poder despedirnos con la sensación de que volveremos muy pronto.

Recomendaciones: igual que en toda la Costa Brava, cuando empieza el buen tiempo siempre hay más gente. Si podéis venir entre semana merecerá la pena y podréis disfrutar mucho mejor de Tossa. Si solo podéis venir en fin de semana, os recomiendo los meses de Abril, Mayo, Junio, o bien Septiembre y Octubre. En pleno verano Tossa también está muy bien, pero si queréis disfrutarlo con tranquilidad, yo lo haría así.
Si tenéis alguna duda, ¡decídmelo!